martes, 30 de julio de 2013

La creatividad


En el libro “Canciones para jugar” de editorial Ediba hay un pequeño texto sobre la creatividad que me fascina y dice así:
Todas las personas, niños, adolescentes, adultos, son estimuladas por la relación con el mundo que, a veces, les permite crecer y desarrollarse bien y en otras ocasiones inconvenientes que obstaculizan el crecimiento. El concepto de crecimiento, para el caso, se puede unir al de creatividad, entendiendo que para poder hacer un buen crecimiento es necesario adoptar una actitud creativa frente a la vida.
Dice Gianni Rodari: “La función creadora de la imaginación, pertenece al hombre común, al científico, al técnico, es tan necesaria para los descubrimientos científicos como para el nacimiento de la obra de arte, e incluso condición necesaria de la vida cotidiana…”
“…Precisamente, porque la imaginación se construye sólo con materiales tomados de la realidad, es necesario que el niño, para nutrir la imaginación y aplicarla a tareas adecuadas, que refuercen sus estructuras y alaguen sus horizontes, pueda crecer en un ambiente rico en impulsos y estímulos en todas direcciones…”
Con respecto a este tema, Pescetti nos aclara: “…La imaginación, la lucidez, la capacidad creativa, son herramientas que permiten cierto grado de maniobra, cierta independencia frente a un devenir mecánico de la existencia. Dan posibilidad de modelar  las circunstancias de un modo favorable para la propia evolución…”
“…Enriquecer el mundo imaginario y dar herramientas para la creatividad va mucho mas allá de producir más y mejor, cualquiera sea el campo de actividad. Es algo que responde al deseo de libertad, y al impulso, inherente a todo lo que está vivo, de desarrollar sus potencialidades con la mayor plenitud posible…”
“…Cuando un niño mete las manos en la arcilla las hunde en su imaginación y, en verdad, en su mundo interior el que amasa entre sus dedos. En cada dibujo, en cada cuento, la mente crece, gana en plasticidad para relacionar datos o concebir nuevas ideas, se modela…”
Gianni Rodari dice: “…espero que estas páginas puedan ser igualmente útiles a quien cree en la necesidad de que la imaginación ocupe un lugar en la educación; a quien tiene confianza en la creatividad infantil; a quien conoce el valor de liberación que puede tener la palabra…No para que todos sean artistas sino para que nadie sea esclavo…”
En el mismo sentido Luis María Pescetti agrega: “…El niño que trabaja con arcilla modela su vasija, y la vasija lo modela a él. El que juega a cambiar finales de cuentos va descubriendo que en la vida también hay libertad y maneras para modificar lo que parecía un final obligado…”
Por eso querido educador, busquemos permanentemente actividades creativas, para luego recrear junto con los niños. No nos quedemos con la idea original del juego, hallemos nuevas formas de jugarlo.
Así termina el texto me parece precioso, qué nuestros peques jueguen con arcilla, que cuenten, escuchen e inventen, que pinten, amasen barro, cocinen, resuelvan conflictos pacíficamente, canten, jueguen, hagan cuentos, poesías, canciones, escenarios….las posibilidades…infinitas!!!!
Hasta la próxima
Laura



viernes, 26 de julio de 2013

Familia en el país de los libros (es lo mismo que las maravillas)...con fotos

Desde que leí el blog de Paloma "Paideia en familia" donde describe como leen en familia hermosos, largos y hasta complejos libros, quedé fascinada con la propuesta. En casa teníamos cierto hábito lector, con mi hija de 4 años en ese entonces, pero con los post de Paloma me animé a agregar libros más largos, leyendo capítulos por días, hasta el momento es una experiencia fascinante. Les dejo a continuación algunos (sólo algunos de los hermosos libros que fuimos leyendo)

Primer libro de mi hija, lo elegí por las imagenes grandes, por lo simpley lo colorido. ¿Un defecto? la autora no es argentina.se ve el deterioro pasó por manos de tres bebes que se fascinaron con él.

este es un libro de mi infancia, llevó tiempo que me guste, hoy me encanta.



una versión genial encontrada en la feria del libro.



Libro de mi adolescencia tiene leyendas exquisitamente contadas.



hermosa colección, sin desperdicio

con propuestas al final, ricas no inquisidoas



adquirido a 10 pesos en un parque de Buenos Aires

tenía stikers pegados que cuidadosamente fuí sacando

¿No es una belleza?






Otra linda colección

Otro hallazgo en la feria del libro.


Regalo para mi hijo especial es sobre un niño especial

Delicioso como pueden ver








esta colección me encantó es una selección de adaptaciones de cuentos del mundo


toda las páginas ilustradas

Al final con curiosidades de cada lugar...

y un juego (en este caso teatro pero la mayoría tiene juegos)

Debería agregar la colección roja de Billiken, llevamos leídos "El jardín secreto", "La pequeña princesa", "Alicia en el país de las maravillas", comenzado "Corazón" y de la colección de amarillos "Robin Hood" "El Mago de Oz", comenzamos "Heidi" y "Bajo las lilas"...por supuesto continuará (la lista de los que queremos leer es casi infinita).
Hasta la próxima.
Laura

miércoles, 10 de julio de 2013

Los ritos.

Este tema en sí mismo, no me decía nada, pero teniendo que esperara mi niño en las terapias, habiendo olvidado un libro, muchas veces me pongo a recorrer revistas, desde hace un tiempo varias le han dedicado algún espacio a este tema pero desde diversos ángulos, en especial desde lo familiar. Y ahí es donde me interesó y me puse a leer un poco más. Pero resulta que se trata de un tópico bastante complejo.
También recuerdo el hermoso dialogo que tienen el Zorro con el Principito, cuando dulcemente le pide que lo domestique, dice algo así:

Al otro día el Principito volvió:
-Lo mejor es venir siempre a la misma hora-dijo el zorro- Si sé que vienes a las cuatro de la tarde, comenzaré a estar feliz desde las tres. A medida que se acerque la hora más feliz me sentiré. A las cuatro estaré agitado e inquieto; comenzaré a descubrir el precio de la felicidad! En cambio, si vienes a distintas horas, no sabré nunca en qué momento preparar mi corazón... Los ritos son necesarios.
-¿Qué son los ritos?-preguntó el principito.
-Se trata también de algo bastante olvidado-contestó el zorro- Es aquello que hace que un día se diferencie de los demás, una hora de las otras horas. Te daré un ejemplo. Entre los cazadores hay un rito. Todos los jueves bailan con las jóvenes del pueblo. Para mí el jueves es un maravilloso día, ya que paseo hasta la viña. Si los cazadores no tuvieran un día fijo para su baile, todos los días serían iguales y yo no tendría vacaciones.
Fue así como el Principito domesticó al zorro.

Encontré también un recorte de una revista Viva que había guardado sin haberlo leído demasiado, es una entrevista a  Catherine Bell (especialista en este tema) el titulo decía  “¿Qué significan los ritos?” a continuación algunas ideas que desarrolla esta señora:

Un ritual es una manera diferente de actuar, que uno reviste de especial significado. Es como si uno dijera “Voy a hacer algo distinto de lo que hago habitualmente, algo importante”. No le pongo una definición rígida- dice ella-, acepto como rito lo que la persona considera como tal. Y creo que lo que los hace eficaces es que la persona pone el cuerpo a la creencia de que forman parte de algo mayor que ellos mismos.
¿Cuál es el sentido? Le preguntan y ella dice sentidos hay muchos, es una forma de invocar cierta trascendencia y de transmitir valores o hasta identidad.  Y en general se tratan de eventos sociales, en los que se transmite fuertemente la sensación de unión comunitaria.
La entrevistadora luego hace una pregunta interesante o dos en realidad, sobre la revalorización de los ritos, pero a su vez con esto de la globalización y la new age la otra pregunta es si al tomar elementos de diversas tradiciones no se banalizan los ritos?
La respuesta es inquietante, dice Bell –sí, hay una búsqueda pero muchas veces al tener una sociedad tan secularizada se vacían de contenido, son ritos truncos, por otro lado nadie siente la obligación de hacer lo que “sus” tradiciones dicen sino tomar elementos de otras.
¿Un rito es más fuerte si tiene el aval de varias generaciones? Creo que si porque la persona se identifica con una tradición. Hacer algo que se viene haciendo hace miles de años es una sensación poderosa. Pero no solo en sentido tirano o despótico, aclara más adelante, si un hombre preso hace todos los días lo que le dicen, pero se toma 15 minutos para recitar una poesía, esos son minutos de poder, nadie puede controlarlo y nadie se lo puede quitar.
¿Hay un aspecto teatral en los ritos? Un rito siempre involucra cierta parte del cuerpo. No es algo que se piensa solamente, es algo que se lee, se dice o se hace.
La entrevistadora cita un estudio con niños huérfanos, éste mostró que lo que los ayudó a sanar fue devolverles sus festividades…ella dice no pongo duda esos niños al perder sus padre pierden sus valores y expectativas sociales, al recuperar sus festividades, se reencuentran con su identidad, recuperan su vida pasada, lo que es muy terapéutico.
Y concluye diciendo que las tradiciones como Papá Noel o los Reyes magos le parecen positivas siempre y cuando no caigamos en el consumismo, ya que los rituales de la sociedad moderna exaltan la cultura de consumo y no es esto lo que buscamos perpetuar…
Muy a propósito de esto último habla pilar Sordo en su columna en la revista Susana diciendo...
Aquí dejo el enlace, porque no se puede extractar es valioso de principio a fin, lo que dice es muy simple: festejar, hacer regalos, invitar, agasajar, acompañar. Pensemos porque cuando invitamos gente estamos tan preocupados porque la casa se vea bien (por humilde que sea) creo que en esto de los ritos está la respuesta. Para que sea algo distinto “al lío cotidiano” que además en breve se esfuma toda limpieza porque comemos, jugamos, bailamos, vamos y venimos…pero no importa la magia está en los preparativos, en pensar los detalles, el dedicarnos es placentero, es terapéutico es maravilloso.
Rituales o ritos hay muchos, algunos hasta dan miedo o son ocultos o secretos (tal vez feos) me quedo con estos los que son familiares, los que construyen identidad, dan fuerza como comunidad, pienso en diez ritos actuales de los cuales participamos en familia:

-Ir a misa                                                                
-Rezar el rosario
- Guardar en cajas las cosas del nacimiento de cada hijo (regalos, ropitas, estampas, cositas)
-Leer un cuento antes de dormir.
-Reunirnos con amistades los viernes o sábados.
-Celebrar profundamente Navidad y Pascua (y otras fechas del calendario litúrgico)
-Festejar los cumpleaños y aniversarios (realizar tarjetas, sacar fotos, armar álbumes)
-Visitar los abuelos.
-Ir al cementerio
-Hacer regalos

Pienso además en los ritos o rituales de mi infancia, los que quiero perpetuar, los que añoro, los que recuerdo y me hacen bien...

-Escuchar la radio (a la mañana las necrológicas, tema que a los porteños les resulta muy negativo, para mi es algo natural, a las 20 hs. El programa de tango que se emite hace como mil años jaja y mi papá adora)
-Salir “a pasear” los domingos. (También ir al cementerio, llevar flores, un trapito para dejar todo limpio, cambiar el agua, rezar un ratito, dar un beso en la fotito del ser querido y cuando nos íbamos ir mirando los nichos, los nombres, apellidos, adornos, epitafios, si, si todo un ritual)
-Comer mandarinas a la siesta en invierno, o en su defecto un matecito de té. (no me gustan las mandarinas, pero es algo que hacíamos siempre, para esos tiempos, tengo grabado el sol, el saco de lana, el tronco en que me apoyaba y el olor de la fruta en todo mi ser…)
-Comer todos juntos en la mesa (cada uno en “su” lugar, que aún conservamos)
-La navidad con todos sus elementos heredados de nuestra raíz europea: el pan dulce, el lechón, las tarjetas, los villancicos, los pesebres, el clima festivo, los regalos…)
- Festejar los 15 años (somos 3 mujeres así que mi papá no tuvo opción jaja)
- Los días de lluvia revolver un cajón con papeles y libros (qué placer)
- Los sábados limpieza general, a la merienda pastafrola horneada en la cocina de leña)
-En verano, cosechar frutas y cocinar dulces.
- En invierno carnear (esto sí que era un ritual).

Creo que además hay rituales aún más cotidianos, en mi caso la forma de preparar el mate, la forma de tomarlo (cuando no es de esa manera a mí me falta algo), leer un poquito antes de dormir, o abrir las ventanas los días lindos, o tomar café a la noche, después de limpiar la cocina, o mirar una buena película cuando no salimos… en fin cada uno tendrá el suyo.
En este link hablan de salud emocional en los niños a través de rituales cotidianos de una manera excepcional.

Me queda pendiente (para otro post) los ritos dentro de nuestra religión: el poder, la unidad, los signos sensibles, el sin fin de celebraciones, significados, detalles, artes, costumbres, sacralidad, belleza, armonía, valores, fuerzas, brillos, todo muy profundo y esplendoroso, vale la pena dedicarle un espacio particular.
Finalizo preguntándote, ¿cuáles son los rituales de tu infancia o adolescencia que añorás?, ¿cuáles querés transmitir a tus hijos? ¿Cuáles vivís con tus hijos y querés que se impriman en sus corazones?




con cada nacimiento, la abuela teje una manta

albumes, regalitos emotivos,nanas


las cajitas de recuerdos

la Navidad

el asado de los domingos

visitas, celebraciones

ceremonias,

fotos

regalos y festejos....y tanto más


Hasta la próxima.
Laura