domingo, 28 de abril de 2013

Música y bebé.

En unas jornadas que realicé durante la feria del libro hace algunos años, hubo un sorteo de libros al final, tuve la buena suerte de ganarme tres, uno de ellos se llama "La música en la educación temprana" su autora es Maria Alejandra Labriola y va contando múltiples experiencias en el ámbito de los jardines maternales, también aportando sólidos contenidos sobre desarrollo, evolución, formas de estimular para crecer mejor. uno de los últimos capítulos ofrece algunas actividades y recursos que quiero compartir porque lo he trabajado o lo pienso hacer con mi beba. 
Ella propone usar linternas con papel celofán de color las llama "lápices mágicos para dibujar sonidos" también lámparas con celofán para crear ambientes coloreados con mínimo presupuesto. si es posible también el uso de luz negra esto puede resultar mas difícil adquirirlo en el hogar pero no imposible, también hay que ver que elementos funcionan con ella no todos los blancos o flúor son adecuados.
otro elemento son los guantes: de látex descartable, látex de cocina, exfoliantes y de algodón o lana. se pueden adherir detalles, cascabeles, texturas, etc, la idea central es representar con ellos atributos de sonidos.
Otros elementos: telas como gasas y tafetas, porras, cintas, pelotas...

Como primer paso en la planificación de una actividad tenemos que seleccionar bien la canción o tema musical a trabajar. esto es condición fundamental para el éxito en los resultados. Dicho tema debe ser analizado en profundidad para determinar cuál será el contenido a trabajar y como lo vamos a "mostrar". BRILLANTE ACLARACIÓN.
Agrega un ejemplo muy lindo; se puede realizar una actividad con la canción de Juan Luis Guerra "Como abeja al panal", donde encontramos alternancia de voz masculina y femenina. definamos un color de luz para que represente a cada voz y hagamos coincidir la aparición de la voz con su color. También se pude trabajar con dos guantes diferentes. Las manos se moverán y aparecerán al ritmo de la música y concordando con las voces que se escuchen. 

Propone algunas actividades más, y también discografía verdaderamente hermosa para disfrutar y trabajar. Muy recomendable. 
Espero poder subir pronto fotos de estas actividades con  mis peques.

Hasta la próxima.
Laura

jueves, 25 de abril de 2013

REALMENTE UNA BELLEZA

Lo llaman Mural Cochane, para los que no viven en el este de USA, Cochrane está al Noroeste y Este de Banff al pie de las montañas. Este mural fue inaugurado  en el Rancho Cochrane, cada pieza mide 1 pie cuadrado y se compone de su propia pintura individual. Cada pieza es hecha por un artista diferente. Al colocarse juntas todas las piezas formaron este mural. Puedes pulsar cada una de las piezas para ver en detalle el dibujo: observa el ojo del caballo, la parte de arriba del sombrero de la vaquera, etc. Pulsa sobre…  
 

viernes, 19 de abril de 2013

Oración en un día complicado

Llegado a su fin el día, quisiera ofrecértelo  Señor, bello y reluciente, en una bandeja de plata, con flores y adornos, con brillos y arreglos, con perfumes y aromas, ¡un gran día! lleno de cosas buenas...Sin embargo tengo este día opaco y manchado, con remiendos y agujeros, con gritos y zozobras, con rabias y anhelos, un día sucio y desparejo, lleno de ganas y falto de tiempo, puro reclamo parecido a un ruego...te lo entrego Señor...con un poco de vergüenza y algo de miedo, lo intenté lindo y me salió feo pero se que si te doy este poquito, sabrás que lo intento y me darás la fuerza y me darás la gracia para nuevos momentos...

Hasta la próxima
Laura

miércoles, 17 de abril de 2013

LA FAMILIA ES LA RESPONSABLE DE LA EDUCACIÓN


A continuación dejo un texto de Leopoldo Abadía, que leí en la revista Sophia del verano 2011  
Con algunos bemoles dice algo muy interesante: la formación de los hijos depende de los padres, es deber de los padres, lo hacemos o no hacemos los padres.
No se trata de evadir el reto como docentes, educadores, ministros, etcs. si no de asumir un compromiso como familia educadora, como célula básica de la sociedad y para los que somos creyentes pequeña iglesia doméstica, como dice el autor no se va arreglar nada con tal o cual materia, con poner o sacar determinada asignatura, esto si o si es tarea para el hogar........ acá va la reflexión:
Me escribe un amigo diciendo que está muy preocupado por el futuro de sus nietos. Que no sabe qué hacer: si dejarles herencia para que estudien o gastarse el dinero con su mujer y que "Dios los encuentre confesados". Lo de que Dios los encuentre confesados es un buen deseo, pero me parece que no tiene que ver con su preocupación.
En muchas de mis conferencias, se levantaba una señora (esto es pregunta de señoras) y decía esa frase que me a mí me hace tanta gracia: "¿Qué mundo les vamos a dejar a nuestros hijos?"
Ahora, como me ven mayor y ven que mis hijos ya están crecidos y que se manejan bien por el mundo, me suelen decir "¿Qué mundo les vamos a dejar a nuestros nietos?" Yo suelo tener una contestación, de la que cada vez estoy más convencido:
"¡Y a mí, qué me importa!"
Quizá suena un poco mal, pero es que, realmente, me importa muy poco. Yo era hijo único. Ahora, cuando me reúno con los otros 64 miembros de mi familia directa, pienso lo que dirían mis padres, si me vieran, porque de 1 a 65 hay mucha gente. Por lo menos, 64.
Mis padres fueron un modelo para mí. Se preocuparon mucho por mis cosas, me animaron a estudiar fuera de casa (cosa fundamental, de la que hablaré otro día, que te ayuda a quitarte la boina y a descubrir que hay otros mundos fuera de tu pueblo, de tu calle y de tu piso), se volcaron para que fuera feliz. Y me exigieron mucho.
Pero, ¿qué mundo me dejaron? Pues mirad, me dejaron:
1. La guerra civil española
2. La segunda guerra mundial
3. Las dos bombas atómicas
4. Corea
5. Vietnam
6. Los Balcanes
7. Afganistán
8. Irak
9. Internet
10. La globalización
Y no sigo, porque ésta es la lista que me ha salido de un tirón, sin pensar. Si pienso un poco, escribo un libro.
¿Vosotros creéis que mis padres pensaban en el mundo que me iban a dejar? ¡Si no se lo podían imaginar!
Lo que sí hicieron fue algo que nunca les agradeceré bastante: intentar darme una muy buena formación. Si no la adquirí, fue culpa mía.
Eso es lo que yo quiero dejar a mis hijos, porque si me pongo a pensar en lo que va a pasar en el futuro, me entrará la depre y además, no servirá para nada, porque no les ayudaré en lo más mínimo.
A mí me gustaría que mis hijos y los hijos de ese señor que me ha escrito y los tuyos y los de los demás, fuesen gente responsable, sana, de mirada limpia, honrados, no murmuradores, sinceros, leales. 
Lo que por ahí se llama "buena gente". Porque si son buena gente harán un mundo bueno.
Por tanto, menos preocuparse por los hijos y más darles una buena formación: que sepan distinguir el bien del mal, que no digan que todo vale, que piensen en los demás, que sean generosos. . . . En estos puntos suspensivos podéis poner todas las cosas buenas que se os ocurran.
Al acabar una conferencia la semana pasada, se me acercó una señora joven con dos hijos pequeños. Como también aquel día me habían preguntado lo del mundo que les vamos a dejar a nuestros hijos, ella me dijo que le preocupaba mucho ¿qué hijos íbamos a dejar a este mundo?
A la señora joven le sobraba sabiduría, y me hizo pensar. Y volví a darme cuenta de la importancia de los padresPorque es fácil eso de pensar en el mundo, en el futuro, en lo mal que está todo, pero mientras los padres no se den cuenta de que los hijos son cosa suya y de que si salen bien, la responsabilidad es un 97% suya y si salen mal, también, no arreglaremos las cosas.
Y el Gobierno y las Autonomías se agotarán haciendo Planes de Educación, quitando la asignatura de Filosofía y volviéndola a poner, añadiendo la asignatura de Historia de mi pueblo (por aquello de pensar en grande) o quitándola, diciendo que hay que saber inglés y todas estas cosas.
Pero lo fundamental es lo otro: los padres. Ya sé que todos tienen mucho trabajo, que las cosas ya no son como antes, que el padre y la madre llegan cansados a casa, que mientras llegan, los hijos ven la tele basura, que lo de la libertad es lo que se lleva, que la autoridad de los padres es cosa del siglo pasado.
Lo sé todo. TODO. Pero no vaya a ser que como lo sabemos todo, no hagamos NADA.
1. No he hablado de los nietos, porque para eso tienen a sus padres.
2. Yo, con mis nietos, a merendar y a decir tonterías y a reírnos, y a contarles las notas que sacaba su padre cuando era pequeño.
3. Y así, además de divertirme, quizá también ayudo a formarles.
Hasta la próxima.
Laura